Comenzó a llover.
desde el centro de mi cama, mientras tomo una cerveza puedo escuchar el sonido que hacen las gotas contra la ventana.
Es tan relajante.
Hace años, me di el lujo de caminas bajo la lluvia junto a el.
Era un 24 de Septiembre y estaba dándole una oportunidad al amor.
Algo ingenua, considerando que el era mayor que yo, sin conocimientos de lo que eran los besos adultos, las palabras a medias, las promesas falsas, me deje llevar ese día de otoño.
Recuerdo sus manos tomando mis manos Y nuestro primer beso en el tren.
Lo confundida que me sentía, y lo seguro que se veía.
Jamas le confesé que yo ya me encontraba atraída por el en ese momento.
Que amaba su sonrisa de lado y su mirada traviesa.
en su lugar, le dije un preludio del final.
Le conté una mentira para defenderme, aun cuando, después de eso, tire mis armas y me rendí.
Hoy, mientras escucho la lluvia, puedo sentir lo fría que estaba esa tarde y lo feliz que me encontré a su lado.
Y también lo decepcionante que fue intentar olvidar a mi primer amor.
Jamás los compare.
Nunca tuve el valor para hacerlo.
El era como esa tormenta, tan brusca, sin pausa, pero tranquila por momentos, relajante y pacifica.
Siempre estuve asustada.
Asustada de mi, de el, de todos.
Cuando estaba a su lado solo quería correr.
Nunca sentí que fuera constante.
Y yo luchaba para quedarme.
Tenia mucho miedo de perderme en esa oscuridad húmeda que el representaba.
Y un día, solo paro.
como un grifo comenzó a brotar todo desde mi interior.
Y cuando quise verlo no estaba conmigo, solo había una extraña sombra que se hacia clara en mi interior.
Se había convertido en un chubasco, no era tan magnifico.
como la mañana, salí un día y no mire hacia atrás.
Me atreví a ver sus diferencias, respire con alivio.
Fue extraño, el alivio que sufrí cuando todo termino.
Pero no se enterara en esta vida.
Para el, su existencia en mi es imborrable, intocable.
Y aun cuando mantengo una fotografía de esos recuerdos, me siento ligera de no cargar con sus memorias.
Estoy limpia, como la brisa de primavera.